El barrio de Ategorribarri será el primero de Erandio en disponer de un ascensor urbano. Esta zona activa ya la cuenta atrás para poder utilizarlo, ya que, según informó el Ayuntamiento ayer, “en pocos días” entrará en funcionamiento, con lo que se podrá atender, de esta manera, “una demanda histórica”, tal y como reconocieron desde el propio equipo de gobierno.

Esta instalación, por lo tanto, será la única de estas características en la localidad erandioztarra –sin tener en cuenta el ascensor que comunica el metro de Astrabudua con las viviendas de Kossler–. Así que los vecinos de esta parte de Altzaga podrán salvar, con este elevador y de forma inminente, un desnivel de 5,50 metros, que hasta ahora se pueden recorrer por una rampa que, sin embargo, no es accesible. Las obras para habilitar este equipamiento comenzaron el pasado febrero y han requerido de una inversión que ronda los 150.000 euros, de los que 100.000 han sido aportados por el Gobierno vasco.

Con esta medida se mejora la accesibilidad, en especial, para las personas mayores. Se genera un itinerario accesible entre la confluencia de las calles Gernika y Bereterretxe (a cota + 4,50) y la vialidad interior del barrio (a cota + 9,85). Por lo tanto, se conectan estas calles con la vialidad interior del grupo donde se localizan, entre otros, las entradas a la mayoría de los diez portales que albergan 137 viviendas. “El barrio de Ategorribarri fue construido en el año 1965 a modo y manera de la tipología de la época (grupo residencial de alta densidad sin alineación a calle) y viene demandando desde hace tiempo soluciones de accesibilidad que permita a los residentes llegar hasta sus viviendas en condiciones de normalidad”, admitieron los dirigentes locales. Así que acometer esta obra era una tarea pendiente para el Consistorio, que antes de decantarse por colocar este ascensor urbano, manejó otras posibilidades. De hecho, otras de las opciones analizadas y, posteriormente, descartadas por diferentes criterios técnicos, económicos, urbanísticos y/o medio ambientales, fueron: ascensores en interiores de edificios o adosados a los mismos o en patios; adecuación del vial interior del barrio; ejecución de rampas peatonales en parterres o ejecución de rampas o escaleras mecánicas.

Para los regidores municipales este elevador es la mejor solución y “se ha ejecutado con los menores perjuicios posibles sobre terceros”. También, “se ha tratado de minimizar el impacto visual, así como afecciones a las vistas de los vecinos, buscando, además, integrar la instalación en el paisaje urbano”.